La fragmentación espermática es la rotura del ADN de los espermatozoides.
Estas lesiones del ADN espermático se pueden producir de manera interna, tanto en la formación y maduración de los espermatozoides, como de manera externa, causadas por exposiciones a quimio o radioterapia, altas temperaturas, varicocele, fiebres altas, enfermedades inflamatorias crónicas, sustancias tóxicas, etc.
Las roturas del ADN pueden darse en la cadena sencilla del ADN o en la cadena doble. Las roturas de cadena sencilla se asocian a una menor tasa de fecundación, mientras que las roturas de la cadena doble se asocian a cinéticas embrionarias más lentas, una menos tasa de implantación, y mayor tasa de aborto.
En los últimos años el estudio de la fragmentación del ADN ha ido adquiriendo mayor relevancia y en la actualidad hay numerosos Laboratorios de Reproducción Asistida que lo están incorporando como un nuevo parámetro en el análisis de semen, gracias a tener al alcance nuevos métodos de selección espermática para aquellos pacientes con fragmentación del ADN aumentada, como pueden ser las Columnas de Anexina, Chips Microfluídicos, etc.